¿Cómo hacer una tarta de queso y canela sin horno?
Pocas veces nos apetece encender el horno en verano pero ¿qué hacemos si queremos disfrutar de una tarta casera? ¡Sin problema! En este artículo te vamos a enseñar a preparar una receta de tarta de queso y canela que está para chuparse los dedos. No necesitas utilizar horno y el resultado es tremendamente delicioso. La combinación de texturas y sabores es exquisita: el crujiente de las galletas de canela marida perfectamente con la suavidad de la crema. Y si eres como nosotros que nos encanta la canela, quedarás encantado con esta tarta.
Los ingredientes para esta tarta de queso y galletas de canela son para un molde de 20 cm de diámetro.
Ingredientes para nuestra tarta de queso y canela
Para la base:
- Galletas de canela – 200 gramos
- Nosotros hemos usado las que hacemos en nuestro obrador. Están buenísimas y le da un toque único a esta tarta pero si quieres puedes usar cualquier otro tipo de galleta.
- 80 gramos de mantequilla derretida.
Para el relleno:
- 130 gr. de queso crema estilo filadelfia.
- 500 ml de leche de semi desnatada.
- 100 gr de nata para montar.
- 2 sobres de cuajada.
- 80 gramos de azúcar moreno o panela
- Gotas extracto de vainilla
Pasos para preparar esta tarta de queso y canela
- En primer lugar vamos a preparar la base de nuestra tarta de galletas de queso y canela. Para ello cogeremos unos 200 gramos de galletas, las trituraremos con la ayuda de una procesadora y verteremos la mantequilla previamente derretida en el microondas. Mezclaremos todo y el resultado tendrá una textura a «arena mojada.
- Con la ayuda de una cuchara o una espátula extenderemos la mezcla sobre la base del molde y presionaremos hasta obtener una base firme y uniforme.
- Una vez finalizado este proceso dejaremos reposar la base en el frigorífico.
- Ahora vamos a preparar la crema. La haremos en dos partes:
- Primero disolvemos los dos sobres de cuajada en 250 ml de leche.
- Segundo en un cazo ponemos la nata, el resto de la leche, el azúcar, el queso y las gotas de vainilla. Mezclamos bien con la ayuda de unas varillas y ponemos a hervir. Una vez comience a hervir, añadimos el vaso de leche que habíamos apartado con la cuajada y ponemos a hervir nuevamente sin dejar de mover.
- Cuando se hayan disuelto bien todos los ingredientes, verteremos esta mezcla encima de la base y dejaremos reposar un rato fuera de la nevera hasta que enfríe.
- Con las mismas manos, haremos migajas unas galletas y las esparciremos por encima de la tarta junto con un poco de canela.
- Por último, dejaremos enfriar la tarta en el frigorífico toda la noche.
¿Qué os parece esta tarta? Es super fácil de preparar y el resultado es espectacular. Si te ha gustado, no te olvides de dejarnos un comentario 😉
