Mantecados de hojaldre

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Los mantecados de hojaldre son uno de los postres más típicos del territorio español. Y no nos sorprende en absoluto. Este delicioso dulce tradicional hecho con ingredientes naturales y con manteca de cerdo está absolutamente delicioso. Pequeñas y delicadas capas forman este dulce tan apetitoso. ¡Pruébalos! 

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Descripción


 

El mantecado, como tal, se originó en el siglo XVI a causa de un excedente de cereales y manteca de cerdo en Andalucía. Poco a poco fue dándose a conocer en otras partes de España, convirtiéndose en uno de los postres más típicos del territorio español. Se diferencia del mantecado de vino principalmente por la masa hojaldrada. Los mantecados de hojaldre se preparan con una masa que se conoce como hojaldre porque está formada por finas capas superpuestas.

El mantecado de hojaldre que elaboramos en nuestra panadería es 100% artesano, hecho con ingredientes naturales por lo que no contiene ni conservantes ni colorantes. Un manjar delicioso y natural para cualquier paladar. Es delicado y a la vez crujiente. La única pega es que son tan grandes que cuesta darles un mordisco pero una vez lo consigues, no paras.

¿Qué llevan nuestros mantecados de hojaldre? 


 

Ingredientes: manteca de cerdo 34,78%, harina de trigo 31,41%, masa madre 22,44% (harina de trigo, agua, levadura y sal), margarina 10,10%, levadura 1,12%, sal 0,07 y azúcar.

Declaración intencionada de alérgenos: trigo (gluten) y leche.

¿Cómo los preparamos?


 

¡Qué no te confunda el nombre de mantecado! Nuestros mantecados de hojaldre son una variante del mantecado de vino. El de hojaldre destaca porque el interior está formado por finas capas de hojaldre. Para prepararlo comenzamos mezclando todos los ingredientes durante 10 minutos. Cuando la masa hecha está, se forman planchas lisas de masa para que la manteca se enfríe. Para elaborar las finas capas de hojaldre, lo que hacemos es plisar la masa una y otra vez. Extendemos la masa, doblamos, volver a extender, volvemos a doblar, de nuevo extendemos y de nuevo volar a doblar y así varias veces. De esta forma conseguimos las capas  que caracterizan a nuestros mantecados de hojaldre.

Una vez la masa está doblada y «requete» doblada, se deja reposar en cámaras de fermentación durante 45 minutos hasta que doble su volumen y se cuecen a 230 grados durante 14 minutos. Nada más salir del horno se bañan en azúcar. Cuando aún están calientes para que el azúcar pueda adherirse al mantecado. Y así, nuestros deliciosos mantecados de hojaldre ya están listos para que puedas deleitarte con su sabor.