¿Cómo conservar las magdalenas caseras?
No merece la pena intentar hacer la receta perfecta si luego no nos preocupamos por un aspecto fundamental. Conservar las magdalenas como si estuvieran recién sacadas del horno es más difícil de lo que parece e igual de importante que encontrar la receta perfecta.
Como cualquier otro bizcocho, las magdalenas tienden a secarse desde el primer momento que entran en contacto con el aire. Esto se debe a la estructura de la masa. Es un fastidio cocinar para que luego, por un descuido, al día siguiente nuestras magdalenas se conviertan en incomestibles ladrillos.
En este artículo te queremos mostrar cómo conservar las magdalenas en perfectas condiciones. Y si nunca has preparado este delicioso dulce no te preocupes porque sólo tienes que hacer clic en el enlace de a continuación y aprenderás la receta de magdalenas caseras.
2 formas de conservar magdalenas caseras
Tenemos dos formas principalmente de conservar las magdalenas como si estuvieran recién hechas. A temperatura ambiente o en el congelador. Pero antes de nada necesitamos haber hecho nuestras magdalenas por lo que si aún no las tienes no te preocupes porque hemos preparado un artículo donde aprenderás a hacer nuestras magdalenas caseras. Una receta sencilla y deliciosa.
Una vez hechas lo primero que tenemos que hacer es dejarlas enfriar por completo. Aproximadamente una hora desde su elaboración. Tócalas y confirma que no están calientes. Si las metemos en un recipiente cerrado la condensación se acumulará por dentro y terminarán mojadas.
Conservar las magdalenas a temperatura ambiente.
Lo más importante es elegir el recipiente perfecto. Puede ser un estuche de plástico con un buen cierre o preferiblemente una lata y/o caja hermética. La cuestión es que no entre ni pizca de aire. Si entran en contacto con el aire durante un periodo de tiempo prolongado las magdalenas se secarán, perderán la humedad, su textura cambiará y se endurecerán.
Una vez nos hayamos asegurado que nuestras magdalenas se han enfriado, las introduciremos en dicho recipiente. Tiene que ser lo suficientemente grande como para que quepan todas sin aplastarse unas con otras. Si optamos por poner dos capas podemos usar papel vegetal para separar unas de otras. Lo bueno de este papel es que tiene una fina capa de cera que hace que la comida no se pegue. En este tipo de recipientes, las magdalenas se conservan durante 4 o 5 días. También puedes usar bolsas de plástico herméticas con cierre zip pero seguro que se acaban aplastando y perdiendo esponjosidad.
¡Atención! Si has utilizado frutas para elaborarlas no es recomendable conservar las magdalenas más de 2 días. Este tipo de alimentos tiende a perecer más rápido.
Conservar las magdalenas en el congelador
Mucha gente piensa que conservar las magdalenas en el congelador no es una buena idea. Es cierto qu al congelarlas no estarán como el primer día pero se pueden llegar a mantener en perfectas condiciones mucho más tiempo. Te sorprendía cómo mantienen la humedad.
Lo primero que tenemos que hacer, al igual que el primer método para guardar magdalenas, es dejarlas enfriar por completo. Preferiblemente en una rejilla de enfriamiento una hora como mínimo. Este tipo de rejillas nos sirven por un lado para que se enfríen más rápido evidentemente y por otro evitan que la base de las magdalenas se empapen por la condensación ya que el aire circula por completo. Esto no sucedería si las dejamos en un plato.
Cuando al tocarlas no desprendan calor, lo que haremos será envolverlas en papel film una por una. Tenemos que ajustarlas bien al papel porque así evitaremos que tanto el sabor y el olor de otros alimentos se puedan impregnar en nuestras magdalenas. Puede utilizar un recipiente para guardarlas en vez de una a una. Nosotros preferimos hacerlo cubriéndolas con papel film porque así podemos elegir cuántas vamos a descongelar.
A la hora de descongelaras te recomiendas dejarlas a temperatura ambiente y cuando estén casi, darles un golpe de calor en el horno.
Aspectos a tener en cuenta a la hora de guardar nuestras magdalenas
Un asunto muy importante a tener en cuenta para conservar las magdalenas tanto a temperatura ambiente como en el congelador es utilizar un recipiente de plástico libre BPA. El bisfenol A (BPA) es un químico muy utilizado en la industria del plástico que se ha demostrado que tiene efectos negativos para la salud por lo que tenemos que elegir uno recipiente libre de este tipo de químicos. Hoy en día es muy fácil encontrar este tipo de recipientes.
Otro aspecto fundamental a tener en cuenta es el molde de las magdalenas. A la hora de elaborarlas podemos usar moldes de papel o de silicona. Si utilizas moldes de silicona tienes que desmoldarlas antes de introducirlas en el congelador. El frío interfiere en la composición de la silicona y podemos llegar a estropearlos.
Hasta aquí las dos formas de conservar las magdalenas caseras como el primer día. Dos formas simples pero eficaces. Y ahora si quieres aprender a preparar unas magdalenas deliciosas, haz clic en el siguiente enlace.